Apuntes: Las “4 íes” de las malas políticas
A propósito de la política uruguaya de Colonización de tierras
Detrás de cada mala política pública hay una o más de las siguientes cuatro palabras que comienzan con la letra “i”: ignorancia, ideología, idiosincrasia e intereses (creados).
Piense el lector en cualquier mala política y busque entre esas cuatro palabras a la razón de su sinrazón.
En estos días se ha vuelto a poner sobre el tapete la política de Colonización de la tierra, a partir de la compra por el Instituto Nacional correspondiente, de un campo en el departamento de Florida, de algo más de 4.000 hectáreas y que se pagó más de US$ 30 millones.
Al enterarse de la noticia, muchos uruguayos pensaron enseguida en la escasez de recursos a que suele aludir el ministro de Economía y Finanzas y en el prioritario y consensuado interés en atender la pobreza infantil y juvenil (en el orden del 30% de las personas menores de edad).
Pero más allá de ello, creo que destaca la palabra “ideología” detrás de esta mala política, retrógrada (“propia de tiempos pasados”, según la RAE). Una gestión pública de más de US$ 1.600 millones: 400 mil hectáreas son gestionadas por el INC por medio de sus “colonos”, a un precio medio conservador de 4.000 dólares por hectárea. Dos veces el patrimonio de ANCAP, la petrolera monopólica estatal. Gestión pública sobre la cual los ciudadanos no tenemos información, datos, números, rentabilidades.
Esta política que quizá pudo tener cierto asidero en su inicio, hace décadas, ha perdido toda razón de ser en un contexto de altísima productividad y tecnología, economías de escala y una enorme magnitud de la dotación de capital necesaria para hacer rendir el área asignada al colono.
Se trata, en definitiva, de una mala “política de país”, que se sostiene independientemente de la alternancia de gobiernos de (presuntos) signos contrarios.