Apuntes: la "consolidación fiscal"
Consolidación fiscal es una expresión relativamente reciente que significa ajuste fiscal.
Como tantas otras expresiones “nuevas” que lucen políticamente más correctas: “desafíos” en lugar de problemas, etc.
El gobierno saliente creyó que podría hacerlo mediante la reducción de los gastos y denostó a los economistas que, como yo, dijimos que eso sería imposible sin subir los impuestos.
Cinco años después, queda claro que la creencia del gobierno no tenía asidero, el gasto terminó subiendo en una magnitud similar a la que se había planteado ahorrar.
Y el déficit fiscal, termina donde empezó.
Ahora, el gobierno entrante cree que el ajuste se podrá hacer mediante el crecimiento de la economía, de nuevo, sin subir impuestos.
Para que el crecimiento de la economía permita hacer el ajuste necesario tiene que darse a una tasa significativa (en torno al 3%, por lo menos) y basarse en el consumo del sector privado (pero no en viajes, sino dentro de fronteras).
Además, debe haber un estricto control de los gastos, que no deberían aumentar, lo que es difícil per sé y más cuando es frondosa la lista de compromisos que surgen del programa del FA y de lo expuesto en la campaña electoral el año pasado.
Nuevamente, como hace cinco años, advierto que con eso no va a alcanzar para hacer el ajuste necesario, que permita llevar lo antes posible al 2-2,5% del PIB el déficit del sector público.